Fue tan esperado su regreso, después de dos meses
sin jugar, que apenas saltó a precalentar la hinchada
de Colo Colo soltó una suerte de alarido de alegría y
esperanza. El Mago finalmente entró a los 62 minutos
por el Pájaro Valdés, pero de inmediato los volantes
de rancagüinos le respiraron en la espalda y lo marca-
ron con dureza, sobre todo antes de que el colocolino
recibiera el balón e intentara ejecutar su clásico giro.
En eso estaban cuando a los 89 minutos Tomás Alar-
cón le raspó los tobillos al volante albo, al que rápida-
mente se le fueron las cabras al cerro y terminó desalineando los chakras hasta el punto de empapelar a
quemarropa al árbitro. NO es claro aún que le dijo,
pero Angelo Hermosilla saltó como un resorte y le
puso la tarjeta roja al Mago, que recibió el
"chaaaaaaaaaaaaaaao" burlón de los hinchas locales
y se fue corriendo directo al camarín en su mejor
pique de toda la tarde.
